El lalalal de 2023 se habilitaron 1380 metros u 11.5 cuadras de pavimento en la calle Río Negro de Fontana, más otras calles ubicadas entre esta y la avenida Güemes. El detalle de las cuadras alcanzadas es el siguiente:
- Río Negro entre Alvear y Pasaje Nicolás Roldán: 4.5 cuadras o 540 metros
- García Merou entre Güemes y Río Negro: 1 cuadra o 120 metros
- Felipe Molina entre Güemes y Río Negro: 1 cuadra o 120 metros
- Pasaje Río Negro entre Felipe Molina y Comandante Fontana: 1 cuadra o 120 metros
- Comandante Fontana entre Güemes y Río Negro: 1 cuadra o 120 metros
- Nicolás Roldán entre Güemes y Río Negro: 1 cuadra o 120 metros
- Pasaje Roldán entre Güemes y Río Negro: 1 cuadra o 120 metros
- Lima entre Güemes y Río Negro: 1 cuadra o 120 metros
La licitación se realizó en diciembre de 2022, e incluía las calles Neuquén y Culiaciatti (figura como Pasaje Roldán en el IDE Chaco) que trataré en otro artículo. En la apertura de sobres se mencionó que Río Negro debía alcanzar la avenida Marconi (solo alcanzó un poco más de la mitad de lo planificado), y que las calles entre Río Negro y Neuquén, pero las limitaba a las calles García Merou, Molina, Comandante Fontana, Pasaje Roldán y Carlos Gardel. Además informaba que el total era de 2700 metros, incluyendo Neuquén y Culiaciatti. Río Negro tiene 1000 metros lineales, Culiaciatti y Neuquén sumados tienen también 1000 metros lineales, lo que nos deja 700 metros o unas 6 cuadras más que coincidiría con las calles enumeradas. Sin embargo, ya hemos visto que Río Negro no avanzó y lo mismo pasó con la calle Gardel Gardel; sin embargo, sí se concretaron calles que en principio no estaban incluidas: Pasaje Río Negro entre Molina y Fontana, y Lima entre Río Negro y Güemes (Lima es la paralela siguiente a Gardel por lo que es factible que haya algún problema de nombres ahí). En definitiva, sobre 1700 metros planificados se concretó un 81%.
La mala noticia es que Río Negro que no se terminó era justamente la más importante de todo este paquete, al permitir una circulación dividida con la avenida Güemes que es el eje que comunica todo el sector, más ahora que la pavimentada avenida Marconi facilita el acceso. Además, las que sí se terminaron no revisten mayor importancia. Es una estrategia que se aplicó en otros sectores y no termino de entender, al pavimentar todas las perpendiculares entre ejes se favorece el tránsito de ese sector (ayudando a que se respete el sentido único), pero que no puede ser tan importante en un barrio como este donde no hay prácticamente circulación que no sea de este sector habitacional. Menos todavía los pasajes ubicados a medio camino entre Güemes y Río Negro (en este caso fue solamente una cuadra pero que hubiese sido mucho más redituable en otro sector).
Fontana necesita muchos otros troncales antes de esta suerte de duplicación del troncal de Güemes que se hizo y que como tantas obras iniciadas en 2023 al calor de la campaña electora no se terminó. Mientras tanto, nos quedan estas calles para algunos afortunados sin mayor criterio que haber sido bendecidos por el entonces gobernador Capitanich.
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