Cambio de época

Diciembre de 2023 fue el último mes de la gestión de Jorge Capitanich al mando del Ejecutivo Provincial, y el primero de su rival y sucesor Leandro Zdero. Qué pasó con las obras viales en el Gran Resistencia durante los últimos 8 años de dominio del PJ a nivel provincial, y qué pasó este año con las mismas, es lo que pretendo contestar acá, cuando a más de 6 meses podemos hacernos una idea de por dónde va encaminada la cuestión, aun cuando todavía falta mucho por conocer.

El 17 de septiembre de 2023 los chaqueños elegimos gobernador, y por cuarta vez en la historia el Poder Ejecutivo cambió de color político por medio del voto, un síntoma de sanidad en nuestra vida democrática aun cuando los indicadores socioeconómicos no pareciera importarles. Terminó además el ciclo más largo de hegemonía política, 16 años en los que Capitanich fue la figura casi indiscutida incluyendo los 4 años en que fue intendente de la ciudad de Resistencia. Este blog nació en 2015 en parte como respuesta ante lo que fue una campaña a intendente en la que Capitanich quiso convencer(nos) a la ciudadanía que era el candidato adecuado bajo la premisa de que pavimentaría 5000 cuadras en su mandato y el siguiente. Estaba seguro de que era un número inviable, y además el gobernador tenía un historial de arrojar números a mansalva sin mucho sustento, por lo que me pareció entretenido entrar en el juego de los números. En 2023, en cambio, la cuestión «pavimento» casi no fue mencionada en la campaña ni a nivel provincial ni municipal (NOTA AL PIE: en 2011 Gustavo Martínez también había propuesto un número delirante de cuadras, algo que pasó por alto en sus intentos posteriores).

Las cifras de 2015-2023

Para un resumen rápido: en el período 2015-2023 se ejecutaron 208.36 km de pavimento en calles, avenidas y rutas de los 4 municipios del Gran Resistencia; 155.48 km correspondieron a Resistencia, lo que equivale a un 74.6% del total, casi idéntico a la proporción de población del municipio capitalino sobre el total del Gran Resistencia. Estos 155.48 km son unas 1243 cuadras, lejos de las 5000 prometidas, pero —hay que ser justos— una cantidad nada desdeñable. Representan asimismo un 11.5% del total de 1350 km en nuestra ciudad, en algún momento el ex gobernador expresó que el 50% de las calles de Resistencia se hicieron en su gestión, algo tan ridículo que no amerita detenerse mucho. El problema de Capitanich estuvo sin embargo en la calidad más que en la cantidad. Estoy seguro que su gestión hubiese sido recordada como de un progreso constante si hubiese hecho la mitad de cuadras pero con mayor espíritu estratégico; de hecho se notaba en sus discursos y obras encaradas la permanente búsqueda de hacer crecer el número, lo que hizo disminuir la proporción de calles troncales, ya que estas por nuestra geografía, llevan consigo por lo general un aumento importante del costo por los correspondientes desagües pluviales. Estos desagües en líneas generales se hicieron, aunque tenemos casos como Édison o Rosas donde fueron obviados. Algo que siempre me resultó muy extraño es que esa desidia por lo estratégico era exclusiva de Resistencia, en Barranqueras y Fontana los intendentes aliados del ex gobernador supieron encauzar las obras con muy buen tino, casi completando el recorrido del transporte público en ambos municipios; no obstante, el último año también se notó un crecimiento de cierre de mallas cuyo único objetivo parecía ser el de sumar cuadras.

Además debemos separar la gestión en dos puntos claros. En 2015-2019 que ejerció como intendente fue muy alevosa la preferencia de la provincia que él no controlaba de forma directa por obras en la ciudad, superando el 90% de lo ejecutado en el ára metropolitana. En 2019-2023 fue más equitativo, o en realidad, compensó ese desvío con un porcentaje menor a Resistencia. Cabe aclarar igualmente que en ese último período el intendente Martínez no fue particularmente prolífico, con un total de 7.1 km ejecutados en toda su gestión por el municipio. Sí puede destacarse que a diferencia de su antecesor, las obras encaradas por Martínez fueron en su totalidad obras de avenidas o calles troncales.

En lo positivo hoy tenemos 3 chacras linderas al casco céntrico con la totalidad o prácticamente la totalidad de sus calles pavimentadas, antes de 2015 no había ninguna y de hecho faltaba mucho para terminar cualquiera de ellas; asimismo nos queda una sola cuadra que sale del casco céntrico sin pavimento, la calle Córdoba después de Vélez Sársfield, en 2015 eran 6. Lo negativo, todavía quedan 200 cuadras del recorrido del transporte público que siguen siendo de tierra (a las que se deberían sumar muchas cuadras de avenidas o ejes importantes también de tierra donde no circulan líneas de colectivo).

2023, las elecciones entran en juego

El último año fue caótico. Los 39 km que se ejecutaron en Resistencia (35.4 de la mano del Ejecutivo Provincial) fueron por amplia diferencia los de mayor cantidad de cuadras ejecutadas en la ciudad, casi el doble de los 19 km de 2018. Resulta más sorprendente si notamos que después de las elecciones de septiembre no hubo avance alguno. No fue exclusivo de la capital sino que hubo 10 km en Barranqueras y 13 km en Fontana (en Puerto Vilelas en cambio fueron solamente 150 metros), e incluso a nivel provincial quedaron paralizadas 8 obras de pavimentación en rutas, más otras 6 con distinto grado de avance en la licitación. En los tres municipios el caos de obras sin respaldo financiero fue tal que una vez que pasaron las elecciones quedó en evidencia una serie de sectores inconexos, esquinas abandonadas, en algunos casos vueltas a tapar con ripio, tramos de tierra de 10 metros en medio del hormigón y hasta pozos de 4 metros de profundidad excavados en la línea de calzada para ductos pluviales inconclusos. Aquí es donde conectamos con las gestiones sucesoras a nivel provincial y municipal, a las que les toca arreglar esos desbarajustes.

El resultado a nivel provincial fue categórico en el Municipio de Resistencia donde el descontento con la gestión de Martínez quedó expuesto en el 25% de su cónyuge a la que intentó imponer como sucesora, o el 5% que cosechó para gobernador en la ciudad donde se hizo fuerte políticamente desde sus inicios en política. En Fontana ganó el peronista Rodas para renunciar poco tiempo después, por lo que hubo que convocar nuevamente a elecciones; en esta oportunidad triunfó el radical Cuadra, aliado de Zdero al igual que Nikisch en Resistencia. Vilelas repitió un viejo intendente que se desmarca con una una tercera posición que pareciera solo quiere evitar problemas con el Ejecutivo provincial de turno. Y Barranqueras quedó como el bastión opositor en el área metropolitana.

La nueva gestión

En Resistencia desde el día 1 fue evidente la necesidad de superar el estado calamitoso del centro, con calles detonadas, a veces con tramos de tierra de 50 metros a causa de la decisión de sacar las líneas de colectivo de la plaza central hecha en tiempos de pandemia. Las calles no aguantaron el peso de tantos colectivos, pero a Martínez eso no le inmutó, los baches y remiendos sucesivos se acumularon hasta encontrar una rápida solución en los primeros tres meses del tándem Zdero/Nikisch. Luego retomaron tímidamente algunas obras suspendidas: la pavimentación de la avenida Falcón (la más peligrosa por sus pozos profundos para el desagüe pluvial), las calles Río Guaycurú y Mar del Plata donde circula la línea 2C, a las que se sumaron otras, todas en Resistencia a excepción del ensanche de la avenida 9 de Julio que avanza sobre Barranqueras. En junio se hizo la primer y hasta ahora única inauguración formal: cuatro cuadras de Villa Don Enrique. El mismo mes se informó sobre el avance en el barrio San Miguel, 9 cuadras inauguradas en agosto. En julio también se culminaron 4.5 cuadras en la calle Bosch, que se realizaban en paralelo con un proyecto de 2023 que no había iniciado: 9 cuadras alrededor de la escuela 804. En agosto se informó también el avance en el barrio UPCP, 9.5 cuadras a las que les falta muy poco para finalizar; se anunció asimismo la habilitación de Río Guaycurú y Mar del Plata. El punto más importante fue cuando se anunció la reanudación de las obras de repavimentación en 9 de Julio y pavimentación de Arribálzaga, que incluían el ensanche de 9 de Julio en Barranqueras; el trámite consistió en que Nación ceda a la provincia la deuda tomada con la Corporación Andina de Fomento con dicho fin.

ACTUALIZACIÓN: esta nota menciona la nueva obra de pavimentación en Fontana y anticipa otras.

En el cuadro del debe siguen un montón de obras en las que se destaca la pavimentación de la avenida Édison y otro sector de Arribálzaga. En la esquina de ambas el cartel de obra fue prolijamente reemplazado por uno donde podemos apreciar el rostro de Zdero, pero no hubo ningún anuncio ni movimiento de suelo. Estimo que si cambiaron el cartel es porque estarán próximos a retomarla (ACTUALIZACIÓN: efectivamente se retomó el 3 de septiembre de 2024), se nota además un mayor impulso a obras estratégicas (las primeras que arrancaron son Falcón y Río Guaycurú, dos de las más importantes); es posible que haya influido en esta priorización la experiencia previa de Zdero como Jefe de Gabinete del municipio. A juzgar por la cantidad de proyectos retomados uno podría pensar que seguirán en el camino de finalizar lo que quedó a medias, esperemos que no solo en la capital, pero son tantos y muchos irrelevantes que no podemos darlo por sentado. Repasemos el listado:

Resistencia

1. Calle José Ameri: quedó trunca una cuadra entre La Rioja y Catamarca que serviría para vincular Lavalle con La Rioja
2. Barrio Vélez Sársfield: hay por lo menos una bocacalle inconclusa en García Merou y Sierras de Córdoba, y probablemente más cuadras sin comenzar a juzgar por la diferencia entre la cantidad anunciada y la habilitada
3. Barrio Juan de Garay: falta la bocacalle de Jujuy y Cataratas del Iguazú. Además hay un segmento de Moreno entre Sierras de Córdoba y el paso a nivel, y probablemente otras calles como Villa Carlos Paz y Lago Argentino
4. Villa Ercilia: falta la bocacalle de Pío XII y Lima, más la calle San Roque y el vínculo entre esta y Hernandarias por Fontana, Roldán y Arazá.
5. Lonardi: deberia haber llegado desde Seelstrang hasta Farías, pero avanzó desde Seelstrang sin alcanzar la calle Firpo (menos de la mitad de lo planificado)
6. Chacra 128: la bocacalle de Fotheringam y Godoy, posiblemente más calles como Fotheringam o Pasaje Boronat
7. Barrios Eva Perón y Valussi: se hicieron 19 sobre un total de 45 anunciadas, quedando el sector de Valussi como pavimento desconectado. También resta la bocacalle de Fortín Tapenagá y Capataz Codutti
8. Empalme de Colectora Baroni con RN16: posiblemente sea gestión de la empresa que realiza el mantenimiento de la autovía, quedó una cuadra sin hacer.
9. La Rubita: solo se hicieron 3 cuadras de un total probable de 1 km

Fontana

1. Mendoza: falta bocacalle con las calles Chile, Perú y Buenos Aires
2. Uruguay: falta bocacalle con el Pasaje Santiago del Estero
3. Río Negro y perpendiculares: falta Río Negro desde Pasaje Fontana, y las perpendiculares desde Gardel
4. Misiones entre Santiago del Estero y 25 de Mayo, y 25 de Mayo después de Augusto Rey: fue comentado en noticias pero no se inició. Es la obra más importante que necesita Fontana hoy en día
5. Diagonal Hartenek: no encontré información pero posiblemente le falte una cuadra. Quizás alguna más en calles Fontana y Roldán
6. San Luis: anunciado pero nunca iniciado entre Diagonal Cabral y Marconi
7. ¿Barrio Floriani? Es posible que falte asfalto en calle Paraíso

Barranqueras

1. Cuadrante centro Barranqueras: se terminaron 11 cuadras sobre un total de 32 en zona entre Córdoba, Ayacucho, Gaboto y Cané.
2. Avenida Las Piedras: se terminó la calzada ascendente, falta la descendente

A nivel provincial, en cambio, las rutas lucen todas detenidas. No hay novedad alguna de las obras con financiamiento provincial, nacional ni de organismos internacionales. El Gobierno firmó ya un acuerdo con el Ejecutivo Nacional pero el detalle misteriosamente no fue bajado a los mortales.

Como vemos las obras avanzan casi con exclusividad en Resistencia, donde priman las obras estratégicas pero también muchas intrascendentes. Esperemos en los próximos meses que tengamos novedades sobre proyectos nuevos. Además de pavimentar el recorrido del transporte público y avenidas, Resistencia necesita con urgencia dos proyectos de envergadura: un nuevo puente sobre el río Negro y la refuncionalización de la avenida Soberanía Nacional/Malvinas Argentinas.

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